Toda
denominación tiene sus controversias y por supuesto la denominación bautista ha
tenido varias una de ellas. Hay una que se llama “la controversia del canto de
himnos” la cual surge porque en las primeras etapas de las iglesias bautista no
se cantaba himnos en las iglesias. Pero un pastor llamado Benjamin Keach introdujo
un himno al final de la Cena del Señor basado en Mateo 26:30 donde Jesús canta
un himno después de la Cena. Varios miembros de esa misma iglesia no estuvieron
de acuerdo con la posición del pastor y después de una votación en donde la
mayoría de la iglesia apoyo a su pastor los que no estuvieron de acuerdo se
fueron de la iglesia[1].
Luego
de esa salida de esos hermanos esta controversia comenzó a llegar a todas las
iglesias bautistas y a dividirse respecto al tema. El pastor que más
fervientemente se opuso a esta práctica fue un pastor de apellido Marlow el
cual el cual etiquetaba a Benjamín Keach como un “escritor ridículo”,
“entusiasta”, “ignorante”, “cuáquero”. Por supuesto ambos creían basar sus
argumentos en la Escrituras y que las interpretaban correctamente. Finalmente
después de años de controversia Benjamín Keach resulto ganador en esta
dispuesta pues pudo refutar cada uno de los argumentos planteados por Marlow y
mostrar que su posición era más convincente a través de las Escrituras. Un
profesor del Seminario del Sur escribió sobre esto[2]:
“A Benjamín Keach se le puede agradecer no
solo por los bautistas, sino por los cristianos en general por el privilegio a
menudo despreciado, de sostener un himnario en la mano y cantar alabanzas y
oraciones en la congregación de los santos”
Con
esto podemos ver que para los bautistas históricamente lo que se hace en el
culto y como se practica el cual ha sido importante. Y esto mismo es lo que el
apóstol Pablo a está desarrollando con los hermanos en Corinto. Pablo comenzó
en el capítulo 12 a hablar del culto y en este capítulo 14 en general ha
querido tratar el tema de las lenguas en contraste con la profecía (1 Cor
14:1-5) y luego ha dado diversas analogías para ejemplificar como las lenguas
no resultan edificante si no hay interpretación (1 Cor 14:6-12) Por tanto lo
que ahora quiere mostrarnos es que pasaría si usamos la lenguas en el culto sin
interpretación en las oraciones cantos y enseñanzas de la iglesia.
Orar y
cantar en lenguas 1 Corintios 14:13-17
Pablo
vuelva a retomar aquí lo que había establecido en los primeros versículos de
este capítulo que fue poner en contraste las lenguas con la profecía (1 Cor
14:1-5) y como el que habla en lengua extraña se edifica a si mismo mientras
que el profetiza edifica al a iglesia. Versículos
13-14
“Por tanto, el que habla en lengua
extraña, pida en oración poder interpretarla. Porque, si yo oro en una lengua
extraña, es mi espíritu el que ora, pero mi entendimiento no se beneficia”
(RVC) “Por esta razón, el que habla en lenguas pida en oración el don de interpretar
lo que diga. Porque, si yo oro en lenguas, mi espíritu ora, pero mi
entendimiento no se beneficia en nada” (NVI) “Por tanto, el que habla en
lenguas, pida en oración para que pueda interpretar. Porque si yo oro en
lenguas, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto” (LBLA)
Pablo comienza
esta nueva sección con un “por tanto” (RVC; LBLA) “por esta razón” (NVI) habiendo
la conexión con las analogías que había usado para explicar que deben procurar
la edificación de la iglesia. En términos generales lo que Pablo nos dice aquí
es que si uno habla en lenguas (idiomas) es mejor pedirle al Señor poder
interpretarla porque sino no será edificante para el mismo (1 Cor 14:4, 14) ni
mucho menos será edificante para los demás pues nadie entendería nada. Ahora si
observamos el versículo 14 un poco más detenidamente vemos que Pablo hace una
distinción cuando ora en lenguas y es el espíritu el que ora pero el
entendimiento no se beneficia. ¿A qué se refiere con eso? Quiere decir que el
espíritu de Pablo ora en lenguas según lo que el Espíritu Santo le da a Pablo
para que ore.[3]
Romanos 8:26
“De igual manera, el Espíritu nos ayuda en
nuestra debilidad, pues no sabemos que nos conviene pedir, pero el Espíritu
mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles”
Por
tanto lo que Pablo nos está mostrando es que si él hablaba en un idioma extraño
no solamente él no tendría ningún beneficio sino tampoco la congregación que
escuchaba la lengua extraña entendería. Algunos comentaristas ven todas
palabras de Pablo como algo hipotético que él se está refiriendo a que si “yo
hablara en lengua y no entendería” esto es lo que sucedería y no que
necesariamente Pablo haya hablado en lenguas[4]. Sin embargo aunque es
posible que esta parte Pablo fuera hipotética queda claro en versículos más
adelante que Pablo si hablaba en lenguas (1 Corintios 14:18) Ahora no debemos
olvidar que la oración publica muy importante en el culto desde el Antiguo
testamento (Esdras 10:1; 1 Reyes 8:22-23) En el nuevo testamento Pablo da
instrucciones sobre las oraciones públicas. 1 Timoteo 2:1-2
“Ante todo, exhorto a que se hagan
rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias por todos los hombres;
por los reyes y por todos los que ocupan altos puestos, para que vivamos con
tranquilidad y reposo, y en toda piedad y honestidad”
Como
podemos ver las oraciones que se hacían en público eran todas en el idioma
común de las personas por tanto el hacer oraciones en un idioma diferente
solamente traería confusión en vez de claridad. Versículo 15
“Entonces ¿Qué debo hacer? Pues orar con
el espíritu, pero también con el entendimiento; cantar con el espíritu, pero
también con el entendimiento” (RVC) “¿Qué debo hacer entonces? Pues orar con el
espíritu, pero también con el entendimiento; cantar con el espíritu, pero
también con el entendimiento” (NVI) “¿Qué, pues? Orare con el espíritu, pero
también con el entendimiento; cantare con el espíritu; pero cantare también con
el entendimiento” (LBLA)
En
este versículo Pablo nos muestra cómo solucionar el problema que es orar en
lenguas sin ningún beneficio para él ni la reunión de hermanos en el culto
público. El no niega la posibilidad de seguir “orando en el espíritu en
lenguas” sino más bien nos dice que debe hacerlo también con el
“entendimiento”. Luego de hablar de la oración vemos que introduce también el
cómo se debe cantar en el culto público. El cantar congregacionalmente era algo
comúnmente practicado en las iglesias. Efesios 5:19; Colosenses 3:16
“Hablen ustedes con salmos, himnos y
canticos espirituales; canten y alaben al Señor con el corazón”
“La palabra de Cristo habite ricamente en
ustedes. Instrúyanse y exhórtense unos a otros con toda sabiduría; canten al
Señor salmos, himnos y canticos espirituales, con gratitud de corazón”
Por
tanto Pablo aquí nos dice que quien “cante en el espíritu” o sea en lenguas
debe hacerlo también con el entendimiento. De lo contrario nadie entenderá lo
que se canta. Y luego para ejemplificar todo esto que viene mostrándonos
respecto al culto público pone un ejemplo y termina con un comentario en los versículos 16 y 17.
“Porque si tu alabas a Dios solo con el espíritu,
¿Qué hará el que solamente está escuchando? ¿Cómo dirá “Amen” a tu acción de
gracias, sino sabe lo que has dicho? Tu acción de gracias puede ser muy buena,
pero el otro no será edificado” (RVC) “De otra manera, si alabas a Dios el
espíritu, ¿Cómo puede quien no es instruido decir “amen” a tu acción de gracias
puesto que no entiende lo que dices? En ese caso tu acción de gracias es
admirable, pero no edifica a otro” (NVI) “De otra manera si bendices solo en el
espíritu ¿Cómo dirá Amen a tu acción de gracias el que ocupa el lugar del que
no tiene ese don puesto que no sabe lo que dices? Porque tu das gracias bien,
pero el otro no es edificado” (LBLA)
Después
que Pablo hablo de orar en espíritu y de cantar en el espíritu ahora quiere
mostrarnos como hacer eso afecta en el culto público con un ejemplo. Pablo se
imagina la escena en donde una creyente en la congregación “alaba a Dios” y da
“acción de gracias” en la congregación. Estas dos frases deben tomarse en
conjunto pues implican las acciones litúrgicas de orar y cantar. En este
contexto, bendecir significa ofrecer alabaza a Dios en adoración.[5] En las sinagogas judías
como en las iglesias cristianas se practicaba las oraciones y cantos públicos
en donde se acostumbraba a expresar un fuerte “amen” al final de ello. Por
tanto si las personas no había entendido nada de lo que había orado o cantado.
¿Cómo podrían decir “Amen” a lo que había dicho? Si observamos con atención el
verso 16 podemos ver que la persona que va a decir “Amen” es descrito como la
“persona que está escuchando” (RVC) “Quien no es instruido” (NVI) “El que ocupa
el lugar del que no tiene ese don” (LBLA) las diferentes traducciones de esta
persona no dejan claro si se trata de un “no creyente que está escuchando” “un
cristiano nuevo que está escuchando” o “un cristiano que no tiene el don para
discernir lo que se está orando y cantando”. La razón de esta dificultad es que
en griego esta es una palabra difícil de traducir. Esto se puede ver en
versículos más adelante donde se vuelve a usar esta palabra y es traducido por
las diferentes versiones como “alguien que sepa poco de la fe cristiana” (1 Cor
14: 23 RVC) “algunos que no entienden o no creen” (NVI) “algunos sin ese don o
son incrédulos” (LBLA) Debido a que sería muy extraño pensar que una persona no
creyente digiera “amen” (aunque no imposible) es mejor entender a la persona
que dice “amen” aquí como un creyente que no tiene el don de interpretación
respecto a lo que se está diciendo en oración y en canciones[6]. Por tanto Pablo concluye
en el verso 17 que aunque las oraciones y las canciones pueden ser “muy buena”
(RVC) o “admirable” (NVI) los hermanos no son edificados con ninguna de ellas
porque no entienden lo que se está diciendo.
Como
podemos ver en este ejemplo que Pablo nos da se está describiendo algunos
elementos del culto de la iglesia primitiva y como ellos debían practicarse en
las reuniones públicas. Por tanto en
primer lugar las oraciones públicas deben ser claras, sencillas y en el idioma
de las personas comunes para que sea de edificación para ellos. Este
mandato que parece bastante simple es sin embargo muy transgredido en el pasado
con el catolicismo romano y su culto en latín como lo es en la actualidad en
muchos cultos evangélicos. Por ejemplo
podemos pensar en muchas congregaciones donde se ora abiertamente en lenguas
sin que nadie de la congregación entiende lo que se está orando ¿No es acaso
esto una evidente desobediencia a lo que las Escrituras nos dicen aquí? O por
ejemplo si vamos a una iglesia donde se ora se la siguiente manera: “Señor, en
este año atamos al diablo y sus maldiciones sobre nuestras vidas y desatamos
prosperidad sobre nuestras vidas” aparte del evidente error bíblico que tiene
esta afirmación es una afirmación oscura para la mayoría de las personas.
Porque ¿A qué te refieres con atar al diablo? ¿A qué te refieres desatar
prosperidad sobre nuestra vida? Si tu conversas con hermanos que recién están
asistiendo a la iglesia y les preguntas sobre esto ellos reconocen que no
entienden nada de esto por lo que se ora. O también podemos pensar en las
personas que oran con palabras rebuscadas o porque aprecian una cierta versión
de la Biblia lo hacen usando palabras que muy pocas personas comunes entienden
¿No es acaso esto una trasgresión a este mandato de hacer todo claramente en el
culto? ¿Cómo los hermanos podrían decir “amen” a todo esto sino lo entienden?
¿No ves que esto es un pecado contra el Señor y contra los hermanos?
En segundo lugar las canciones deben ser
claras, sencillas y en el idioma de las personas comunes para que sea de
edificación para ellos. Como vimos al principio en algunas
iglesias bautistas ni siquiera se cantaba al Señor por tanto pecaban delante de
Dios. Pero aunque hoy en día en muchas iglesias se canta mucho no todas estas
canciones son claras y sencillas. Por ejemplo al igual que las oraciones tenemos
personas que dicen que cantan en lenguas y en realidad ninguna de las personas
que están en las congregaciones puede entender lo que la persona está cantando.
O por otro lado tenemos toda una práctica en las iglesias evangélicas que no
cantamos con entendimiento las canciones que escuchamos sobre Cristo. A modo de
ejemplo hay una canción que dice:
“Hoy me apodero de lo que me pertenece, lo
que me has quitado me lo devolverás con creces[7]”
Hay
muchas personas que cantan estas canciones sin analizar lo que están cantando y
finalmente está cantando cosas anti bíblicas. Por supuesto hay muchos otros
ejemplos en el mundo de canciones cristianas que tienen herejías o se repiten
como “mantras” pero son canciones pecaminosas. ¿No es acaso esto un pecado
contra el Señor al hacerse una falsa idea de él? ¿No es un pecado contra el
prójimo hacerle oír estas canciones que le trasmiten ideas falsas sobre Dios?
El cantar no es solo un ejercicio emocional sino que también debe realizarse
comprendiendo lo que estamos cantando. No hacerlo sería como decir “amen” a
algo que no entiendes.
Enseñar
o predicar en lenguas 1 Corintios 14:18-19
Después
que Pablo da estos ejemplos de cómo las oraciones y las canciones deben usarse
en el culto público ahora el mismo lo ejemplifica con su propia practica como
es común en esta carta (1 Cor 4:16; 11:1)
“Doy gracias a Dios de que hablo en
lenguas más que todos ustedes, pero en la iglesia prefiero hablar cinco
palabras con mi entendimiento, para poder enseñar a los demás que diez mil
palabras en una lengua extraña” (RVC) “Doy gracias a Dios porque hablo en
lenguas más que todos ustedes. Sin embargo, en la iglesia prefiero emplear
cinco palabras comprensibles y que me sirvan para instruir a los demás que diez
mil palabras en lenguas” (NVI) “Doy gracias a Dios porque hablo en lenguas más
que todos vosotros; sin embargo, en la iglesia prefiero hablar cinco palabras
con mi entendimiento, para instruir también a otros, antes que diez mil
palabras en lenguas (LBLA)
Pablo
comienza dando gracias a Dios del porque habla en lenguas más que los hermanos
de Corintio. Pablo reconoce que todo viene del Señor por eso comienza dando
gracias y en seguida hace una afirmación que debe haber sorprendido a muchos
hermanos en Corinto como sorprende a muchos cristianos que Pablo hablaba en
lenguas. Por supuesto algunos insisten que estas son afirmaciones hipotéticas
pero a mí no me convence a la luz del contexto y la clara oración en la cual
Pablo está afirmando que hablaba en lenguas[8]. El apóstol hace un
contraste entre el hablar en lenguas y el hablar en un idioma conocido en el
contexto de las reuniones públicas. Él nos dice que prefiere hablar “cinco
palabras” con su entendimiento ya que esto va enseñar a los demás, o sea va ser
de edificación para los creyentes. En cambio si habla diez mil palabras en una
lengua extraña no va a ser edificación para los creyentes. El apóstol Pablo
enseño con tal claridad en Corinto que era acusado de poco sofisticado en el
mensaje que predicaba. 1 Corintios 1:23; 2:1
“Pero nosotros predicamos a Cristo
crucificado, que para los judíos es ciertamente un tropezadero, y para los no
judíos una locura”
“Así que, hermanos, cuando fui a ustedes
para anunciarles el testimonio de Dios, no lo hice con palabras elocuentes ni
sabias”
Podemos
ver la forma simple y directa en como Pablo predico el evangelio y como en otras
ocasiones se está poniendo el mismo como ejemplo y los está confrontando como
diciéndoles ¿Yo les escribí cartas en lenguas? Cuando estuve con ustedes ¿Yo
les predique en otras lenguas? ¿No he acaso escrito y hablado en la lengua
común de ustedes? ¿Entonces porque hablan en lenguas en la asambleas publicas
donde nadie va a ser edificado? Y esto
nos debe llevar a una aplicación para nosotros también que es que las
enseñanzas deben ser claras, sencillas y en el idioma de las personas comunes
para que sea de edificación para ellos. Al igual como los elementos del
culto la enseñanza o predicación son parte fundamental del culto cristiano y
este debe hacerse en el idioma común de las personas. Pero en algunas iglesias
tenemos a personas que predican y cada cierto tiempo hablan en lenguas mientras
predican ¿No es acaso esa una clara violación al mandato que el Apóstol Pablo
escribió aquí? Y esto es aún más claro cuando vemos que el mismo Apóstol Pablo
que hablaba en lenguas no las hablaba en la adoración publica porque no
edificaba a los demás. Ahora aunque tú puedes enseñar o predicar en el idioma
común de las personas en las cuales estas al prepararte un poco más
teológicamente puedes caer en la tentación de usar un lenguaje que las personas
no lograrían entender ¡Eso sería igual de pecaminoso! J.C Ryle fue conocido
predicador anglicano el cual tuvo la mejor educación de la época y Dios lo
llamo a ser pastor de una congregación donde mayormente había granjeros,
agricultores y ganaderos, o sea gente sencilla.
“Sin embargo, no hay un ápice de desdén u
orgullo de Ryle hacia su congregación. Ryle, había sido educado en el colegio
más prestigioso de Inglaterra, recibido la mejor educación posible de Oxford, y
venia de una familia rica y se encontraba ministrando en un contexto muy
diferente al cual estaba acostumbrado. Sin embargo la iglesia pronto se llenó
para escuchar al joven predicador que predicaba de Cristo en los términos más
simples y sencillos[9]”
Como
podemos ver un predicador tan usado por el Señor se esforzó por ser “simple y
sencillo” a la hora de explicar el evangelio. Por tanto la idea de enseñar o
predicar en el lenguas es algo absurdo pues ¿Cómo van a entender las
enseñanzas? ¿Cómo van a decir “amen” a algo que no entienden? ¿Cómo van a
crecer espiritualmente? ¿Cómo van juzgar con las Escrituras lo que escuchan? Es
seguro que todos en algún momento hemos pecado orando, cantando o enseñando en
lenguas o en un lenguaje elevado para mostrarnos a nosotros mismos como los
inteligentes, sabios o espirituales dejando de lado el lenguaje más sencillo
que deberíamos usar para con nuestros hermanos. Pero he aquí una realidad
asombrosa por nuestras propias fuerzas nunca hubiéramos entendido a Dios, Dios
hubiera sido eternamente incomunicable para nosotros sino fuera porque el mismo
decidió hacerse hombre como nos dice el evangelio de Juan 1:14
“La Palabra se hizo carne, y habito entre
nosotros y vimos su gloria (la gloria que corresponde al unigénito del Padre),
llena de gracia y de verdad.
Que
cosa más asombrosa es pensar que Dios se hizo hombre y hablo en nuestro idioma
común y corriente revelando y explicando los misterios más profundos de la
forma más simple que nos pudiéramos imaginar. ¡Que amor! ¡Que gracia más grande
para con los pecadores!
[1] https://imagenbautista.cl/historiabautista/la-primera-guerra-sobre-la-adoracion-entre-los-bautistas-parte-1-jeff-robinson/
[2] http://imagenbautista.cl/historiabautista/la-primera-guerra-sobre-la-adoracion-entre-los-bautistas-parte-3-jeff-robinson/
[3]
Gordon Fee. La primera epístola a los Corintios. Página 635.
[4]
William Hendriksen. 1 de Corintios. Página 428.
[5]
William Hendriksen. 1 de Corintios. Página 430.
[6]
William Hendriksen. 1 de Corintios. Página 431. Gordon Fee. La primera epístola
a los Corintios. Página 638. Fee cree que no es correcto entender este pasaje
como un creyente que no tiene el don de interpretación.
[7] https://www.youtube.com/watch?v=02bVexQdi7g
[8] Gordon Fee. La primera epístola a
los Corintios. Páginas 639-640.
[9]
Grandes líderes del siglo XVIII. Una era de avivamientos. Editado por Jaime
Caballero. Página 21. Editorial teología para vivir.