Nancy Pearcey es una influyente y conocida
escritora cristiana la cual a escritora varios libros. Uno de ellos llamado
“Verdad Total” cuenta como cuando estuvo en la iglesia tuvo varias dudas las
cuales nunca fueron tratadas de forma adecuada lo que hizo que terminara siendo
agnóstica. Luego de varios años volvió al cristianismo debido a que pudo
encontrar una respuesta adecuada en el cristianismo para todas las dudas y
preguntas que ella tenía[1].
En el cristianismo en general las dudas no son vistas con muy buenos ojos por
los demás pues se catalogan como falta de fe, pero algunas dudas son buenas
porque finalmente lo que hacen es reafirmar la fe que ya tenemos cuando
logramos entender el sentido de ello. Por ejemplo las Escrituras nos llaman a
tener misericordia con aquellos que tienen dudas y a dar razones bíblicas de
porque creemos lo que creemos. Judas 22; 1 Pedro 3:15
“Sean
comprensivos con los que dudan”
“Al
contrario, honren en su corazón a Cristo, como Señor, y manténganse siempre
listos para defenderse, con mansedumbre y respeto, ante aquellos que les pidan
explicarles la esperanza que hay en ustedes”
En este capítulo de la carta Pablo está
respondiendo sobre temas que los Corintios tenían dudas como el matrimonio (1
Cor 7) los sacrificado a los ídolos (1 Cor 8) Los problemas de la adoración
publica (1 Cor 11-14) La resurrección (1 Cor 15) y la recaudación de las
ofrendas para los cristianos en Judea (1 Cor 16) La primera duda era respecto a
las relaciones sexuales en el matrimonio ya que la misma filosofía dualista que
ponía la base para que se enseñara que se podía hacer con el cuerpo cualquier
inmoralidad sexual (1 Cor 6:12-20) era la misma para que se enseñara que debido
a que el cuerpo es malo las relaciones sexuales en el matrimonio es algo poco
espiritual. Pero Pablo iba a argumentar que esto no era así, que si bien era
bueno para el hombre no tener relaciones sexuales y quedarse en celibato como
el sin embargo a aquellos que estaban casados era un mandato y una deuda tener
relaciones sexuales con regularidad (1 Cor 7:1-7) Y ahora va pasar a responder
varias dudas sobre los solteros, las viudas y los casados.
Consejos para
los solteros y la viudas 1 Corintios 7:8-9
Entonces Pablo comienza a resolver las dudas
que había sobre este primer grupo que
eran los solteros y las viudas. Varios
comentaristas piensan que esta es una digresión de Pablo[2].
Una digresión es romper el hilo conductor de un discurso que se está
realizando. Por ejemplo Pablo habla en los primeros 7 versículos acerca de que
el matrimonio se debe tener relaciones sexuales con regularidad y luego del
verso 10 al 16 les habla a los matrimonios de cristianos como a los matrimonios
casados con un no creyente. Por tanto los versos 8 y 9 están al medio de toda
esta conversación y por eso los comentaristas ven aquí una digresión. Este era
un recurso comúnmente usado en el mundo antiguo en los discursos.[3]
Por tanto Pablo va abordar en estos versículos a los solteros y las viudas y
luego volverá a los casados.
“A los solteros y a las viudas les digo que
sería bueno que se quedaran como yo” (RVC) “A los solteros y a las viudas les
digo que les que sería mejor que se quedaran como yo” (NVI) “A los solteros y a
las viudas digo que es bueno para ellos si se quedaran como yo” (LBLA) “Así que
les digo a los solteros y a las viudas: es mejor quedarse sin casa como yo”
(NTV)
En el verso 8 vemos que nos
habla acerca de los “solteros” lo cual significa en griego “No casados”. Ahora
si uno sigue leyendo el capítulo 7 se va a encontrar una exhortación bastante
amplia a los solteros y solteras en 1 Corintios 7:25-38. Por tanto la pregunta
que se han hecho los comentaristas es ¿Por qué Pablo hablaría de los solteros
aquí si luego iba a volver a referirse a los “solteros y solteras” más adelante
en donde incluso iba a mostrar que es más beneficioso en el contexto del
cristianismo del primer siglo quedarse sin casar? Esta pregunta ha hecho que
los comentaristas sospechen que aquí Pablo no se está refiriendo a los solteros
como los que nunca se han casado, sino a los solteros como a los viudos y
probablemente divorciados. Por tanto existen varias posiciones para abordar
este pasaje.
La primera posición es
la que piensa que aquí simplemente se está refiriendo a los solteros que nunca
se han casado.
La segunda posición
es la que piensa que se refiere a los que nunca se han casado pero además a los
viudos pues la palabra no significa "nunca casado” sino “no casado ahora”
y que no había una palabra para llamar a los viudos así que se usaba la misma
palabra que para solteros. Además que este al lado de las viudas nos muestra
que en la mente de Pablo es probable que esté pensando en los viudos también
como solteros[4].
La tercera posición es la que creen que incluye a toda clase de
solteros en donde no solo hay solteros y viudos sino además divorciados[5].
Yo creo que la evidencia bíblica sugiere que Pablo se está refiriendo a los
solteros y a los viudos pero encuentro difícil incluir a los divorciados. Por
tanto creo que Pablo se está refiriendo a los solteros y a los viudos en este
pasaje.
Entonces Pablo comienza diciéndoles a los
solteros que nunca se han casado como a los viudos y viudas que estuvieron
casado en algún momento que sería “bueno” o “mejor” que se quedaran como el, o
sea que no busquen casarse por primera vez los que nunca se han casados como
los que ya estuvieron casados que no busquen volver a casarse nuevamente. Pablo
va decirnos esto varias veces respecto a que es mejor o bueno quedarse sin
casar (1 Cor 7:1, 7, 8, 26, 38) pero nunca debemos olvidar que Pablo dice eso
reconociendo que estar casado como quedarse solo (célibe) son dones dados por
Dios (1 Cor 7:7) Además Pablo iba a argumentar en versículos mas adelante que debido
al contexto del primer siglo en el cual se iba ir desarrollando el cristianismo
casarse traía ciertas complicaciones (1 Cor 7:28-31) Por tanto podemos
imaginarnos a Pablo hablándoles sinceramente a los solteros, viudos y viudas
¿Están seguros de casarse? ¿Están seguros de querer volver a casarse? ¿No será
mejor vivir como solteros, viudos o viudas para servir al Señor? Esta es una
opción cristiana que tienen.
Pero en el verso 9 nos dice que si
no pueden dominarse es mejor que se casen en vez de arder de pasión (RVC)
“Pero, si
no pueden dominarse, que se casen, porque es preferible casarse que quemarse de
pasión” (NVI) Pero si carecen de dominio propio, cásense; que mejor es casarse
que quemarse” (LBLA) “Pero si no pueden controlarse, entonces deberían casarse.
Es mejor casarse que arden pasión” (NTV)
Pablo les dice a los solteros y viudos que si
pueden dominarse es mejor que se casen. Hay un comentarista[6]
que dice que aquí la idea es más clara si se entiende como “Si están
practicando o no incontinencia” dando a entender que algunos solteros y viudos
no estaban practicando la incontinencia ni dominándose y probablemente estaban
practicando la inmoralidad sexual que Pablo había condenado anteriormente
visitando prostitutas (1 Cor 6:12-20) La segunda parte de este versículo es
traducido como “quemarse de pasión” o “quemarse” (NVI; LBLA) o “arder de
pasión” (NTV) y viene de una palabra que se usaba metafóricamente en los romances antiguos para describir el
despertar de la pasión que había entre los amantes. Por tanto Pablo les está
diciendo que si no tienen el don de continencia y tienen deseos de estar
casados con alguien para poder unirse sexualmente no es bueno que estén solos,
es mejor que se casen. De estos consejos del Apóstol Pablo que dio a los
cristianos del primer siglo podemos extraer principios tan relevantes para la
vida actual de nuestra iglesia.
En primer lugar los solteros deben quedarse solteros o casarse
para la gloria de Dios. En el primer siglo la
situación para los cristianos era complicada para casarse por eso Pablo les
recomienda quedarse como el pero sin embargo les dice que si no pueden estar
solos que se casen. Esto nos muestra que en general los cristianos (y la
cultura en general) buscaban casarse. Pero la situación en la actualidad es más
diferente. La encuesta Casen del 2017 mostraba que el 78% de los jóvenes entre
15 a 29 años están solteros, mientras que el 16% de ellos convive y el 4% está
casado[7].
Esto nos muestra que la cultura chilena los jóvenes no se están casando y que
si uno tiene una leve conversación con ellos se dará cuenta que nos les importa
casarse. Por tanto Pablo les preguntaba a los hermanos en Corinto el ¿Por qué
quieren casarse o porque no quieren casarse? La respuesta es que debían hacerlo
para glorificar a Dios por medio del servicio del prójimo (esposa, esposa) para
la expansión de su reino. Tanto el casarse como el no casarse pueden hacerse de
forma egoísta y pecaminosa. En la actualidad puede pasar lo mismo y pueden
pensar que me podrán casar para poder tener sexo (hombres) o casarse para tener
ese romance constante (mujeres) pero en verdad el fin supremo debe ser para
glorificar a Dios. Ambos estados son dones por Dios para usarlo para él.
En segundo lugar debes prepararte para casarte. Una de cosas que como cultura tenemos más problemas en con la
idea de prepararnos para las cosas. La cultura latina tiene una tendencia a
improvisar en todas las cosas y valora estas cosas como espiritual. Ciertamente
no todo improvisado es necesariamente malo, pero debemos entender que para la
mayoría de las cosas nos preparamos en la vida nos preparamos ¿Por qué no
haríamos en la vida espiritual? ¿Acaso consideramos menos espiritual el
casarse? Hace poco un hermano llamado Jaime Caballero público un artículo
llamado “Joven, reformado y vago” en donde reflexiono en torno a esta
problemática que nos rodea como cultura.[8]
“Recuerdo
una reunión de jóvenes en mi iglesia. Recién había terminado el colegio, y aun
no había entrado a la universidad, así que tendría unos 18 años. Mi pastor en
ese entonces, David Liles, me hizo una pregunta: “Daniel, estás pensando en
casarte”. Si pastor, respondí, en unos 3 o 4 años. “¿Y ya comenzaste a ahorrar?
Su pregunta me dejo frio. Estaba totalmente en lo cierto”
“Recuerdo
hace algunos años conversando con un joven le pregunte: ¿Quieres casarte? Sí,
me dijo. ¿Y cómo vas a mantener a tu esposa e hijos”. Por la fe, fue su
respuesta. Joven, si piensas así, ninguna mujer va a querer casarse contigo.
Vas a tener 30 años y vas a seguir siendo un mantenido viviendo en la casa de
tus padres. Si quieres casarte, ahorra dinero para que tengas una casa que
ofrecer a tu esposa, para que puedas lo suficiente para mantener a tus hijos”
Estos ejemplos nos muestran que debemos
prepararnos económicamente pero la idea de prepararse va mucho más allá de eso.
Debemos prepararnos espiritualmente para poder gobernar el hogar con amor y
sabiduría. Debemos saber que nos dice las Escrituras de los roles y la
adoración juntos en casa para que nuestros hijos sean guiados a Cristo. ¿Te
estas preparando de esa manera? ¿Esta eso en tu corazón o simplemente vas a
improvisar? ¿Oras y estudias las Escrituras sobre estas cosas?
En tercer lugar los viudos y las viudas pueden ser ejemplos
solteros o casados para las futuras generaciones. Los viudos y las viudas son personas que ya han tenido experiencia
en el matrimonio y por tanto puede ser modelo o ejemplos para los futuros
cristianos que buscan casarse. Generalmente este tipo de personas tienen mucha
experiencia práctica para darnos respecto al matrimonio. 1 Timoteo 5:9-14
“En la
lista deben figurar solo viudas mayores de setenta años, y que hayan tenido un
solo marido; que cuenten con testimonio de buenas obras, como haber criado
hijos, practicando la hospitalidad, lavado de pies a los santos, socorrido a
los afligidos y practicado toda buena obra. Pero no admitas viudas más jóvenes,
porque luego se rebelan contra Cristo y, llevadas por sus deseos, quieren
casarse, con lo que incurren en condenación por quebrantar su primera fe.
Además, aprenden a ser ociosas y andar de casa en casa; y no solamente se
vuelven ociosas sino también chismosas y entrometidas, y hablan lo que no
deben. Por eso quiero que las viudas jóvenes se casen y críen hijos; que
gobiernen su casa y no den al adversario ninguna ocasión de maledicencia”
La viudez como cualquier estado puede usarse
para bien o para mal como vemos en estos textos. ¿Quieres volverte a casar para
glorificar a Dios en el matrimonio? ¿Quieres quedarte soltera para glorificar a
Dios? Un ejemplo de esto lo vemos en Ana la cual era una viuda de 84 años y que
había estado sirviendo en el templo todo este tiempo (Luc 2:36-38) ¿Vivirás tu
viudez de la misma manera?
Consejos para
los cristianos casados 1 Corintios 7:10-11
Entonces después que Pablo resuelve las dudas
del primer grupo ahora pasa a resolver las dudas de este segundo grupo que son los cristianos que estaban casados. Hay
que recordar que los Corintios debido a que estaban influenciados por la
filosofía dualista pagana consideraban el cuerpo como algo malo y por tanto
ellos habían concluido que las relaciones sexuales en el matrimonio no eran
buenas a lo que Pablo responde en los primeros 7 versículos (1 Cor 7:1-7) y
también estaban afirmando que uno cristiano podría o debería divorciarse de su
esposa o esposa pero Pablo responde aquí a esa afirmación. En el versículo 10 Pablo responde diciendo que ya existe un mandato
que no es de El sino de Jesucristo.
“A los
casados les doy la siguiente orden (no yo, sino el Señor): que la mujer no se separe
de su esposo” (NVI) “A los casados instruyo, no yo, sino el Señor: que la mujer
no debe dejar al marido” (LBLA) “No obstante, para los que ya están casados,
tengo un mandato que no proviene de mí del Señor. La esposa no debe dejar a su
marido” (NTV)
Pablo aquí esta simplemente repitiendo las
enseñanzas de Jesucristo acerca de mantener la unidad en el matrimonio. Mateo
19:3-9.
“Entonces
se le acercaron los fariseos, y para ponerlo a prueba le dijeron: ¿Es licito
que un hombre se divorcie de su mujer por cualquier causa? Él les respondió:
¿Acaso no han leído que al principio el Creador “hombre y mujer los creo”? Y
agregó: “Por esto el hombre dejara a su padre y a su madre y se unirá a su
mujer, y los dos serán un solo ser. Así que ya no son dos, sino un solo ser.
Por tanto lo que Dios ha unido que no lo separe nadie”. Le preguntaron:
Entonces ¿Por qué Moisés mando darle a la esposa un certificado de divorcio y
despedirla? Él les respondió: Moisés les permitió hacerlo porque ustedes tienen
muy duro corazón, porque al principio no fue así. Y yo les digo que, salvo por
causa de fornicación, cualquiera que se divorcia de su mujer y se casa con
otra, comete adulterio. Y el que se casa con la divorciada, también comete
adulterio”
Este mismo mandamiento se repite en el
evangelio de Marcos (Marcos 10:1-12) como en Lucas (Lucas 16:18) con algunos matices
pero con la misma idea de que los fariseos pensaban que podría divorciarse por
cualquier cosa y Jesús enseña el diseño original del Señor es no divorciarse
sino mantener juntos hasta la muerte y que la concesión dada por Moisés fue
dada por la dureza de los corazones. Así que quien se divorcia de su mujer a no
ser por causa de fornicación simplemente peca. Ahora si observamos en este
pasaje vemos es que el hombre que da la carta de divorcio y eso es porque los
hombres eran quienes tomaban la iniciativa al divorciarse en la cultura judía. Pero
en este versículo se nos muestra Pablo está diciendo “que la esposa no se
separe del esposo” y eso es porque en la cultura grecorromana estaba permitido
que la esposa iniciara un divorcio contra su marido. Por tanto debido al
contexto de Corintio las mujeres estaban rechazando seguir casadas porque
estaban influenciados por la filosofía platónica en donde el cuerpo es malo y
por tanto el matrimonio es algo inferior y es mejor separarse que estar
casados. Es importante no olvidar que por esta razón es que Pablo da esta
enseñanza aplicando las palabras de Jesús a esta situación en particular. Por
tanto Pablo dice que ni la esposa ni el esposo debe iniciar un divorcio por
esta razón porque esto condenado por las Escrituras.
El verso 11 nos dice que en el caso de
separarse ninguno de los dos puede volver a casarse sino que la opción que
tienen es volver a reconciliarse con su marido o esposa.
“Sin
embargo, si se separa, que no se vuelva a casar; de lo contrario, que se
reconcilie con su esposo. Así mismo, que el hombre no se divorcie de su esposa”
(NVI) “Pero si la deja, quédese sin casar, o de lo contrario que se reconcilie
con su marido, que el marido no abandone a su mujer” (LBLA) “Pero si la deja,
que no se case de nuevo o bien que se reconcilie con él; y el marido no debe
dejar a su esposa” (NTV)
Para Jesús como para Pablo el matrimonio era
algo sumamente importante porque es un reflejo del pacto eterno entre Cristo y
la iglesia. Efesios 5:32
“Grande
es este misterio; pero yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia”
Por tanto el divorcio siempre llega por
alguna razón pecaminosa como la fornicación, el adulterio o el abandono del
cónyuge que atenta contra el pacto matrimonial. Pero en esta situación en
particular se estaba promoviendo el divorcio por ideas paganas que había entre
los hermanos de la iglesia de Corinto así que Pablo afirma que si alguien llega
a divorciarse por esta razón no puede volver a casarse sino que debe buscar
reconciliarse con su marido. Es sabido que los judíos se divorciaban por
cualquier cosa y también en el mundo pagano había muchas personas que se
divorciaban de palabra y al parecer los corintios estaban siguiendo estas
prácticas las cuales Pablo dice que son contrarias a la voluntad de Dios y que
no son justificación para volver a casarse. ¿Qué nos puede enseñar estos
consejos que Pablo le dio a los Corintios a una situación en particular del
primer siglo?
En primer lugar debemos valorar el matrimonio como Dios lo
valora. En Chile el matrimonio es cada día mas
ignorado por las nuevas generaciones influenciadas por un sinfín de ideologías que
son contrarias a la palabra de Dios.[9]
Esto lamentablemente parece mostrarse también en la iglesia del Señor donde no
solo no se casan sino que los que se casan luego se divorcian por cualquier
razón. Esto es porque se tiene una visión muy baja respecto al matrimonio
cuando la Escritura nos muestra una visión alta y sublime del matrimonio. El
matrimonio fue creado por Dios y fue el quien entrego a la primera novia e hizo
de dos cuerpos se hicieran uno (Gen 2:24) John Piper en su libro Pacto
matrimonial nos dice[10]:
“Permanecer
casado, por tanto, no se trata principalmente de permanecer enamorados. Se
trata de guardar el pacto. “Hasta que la muerte nos separa” o “mientras vivamos
los dos” es una promesa sagrada de pacto, de la misma clase que Jesús le hizo a
su novia cuando murió por ella…La consecuencia más importante de esta
conclusión es que mantener el pacto con nuestro cónyuge es tan importante como
decir la verdad cerca del pacto de Dios con nosotros en Jesucristo. El
matrimonio no se trata principalmente de estar o permanecer enamorado. Se trata
principalmente de decir la verdad con nuestras vidas. Se trata de reflejar algo
verdadero acerca de Jesucristo y de la manera en que él se relación con su
pueblo. Se trata de mostrar en la vida real la gloria del Evangelio”
Es por eso que en las Escrituras vemos que
quienes serán pastores o diáconos se les exige que sean fieles a sus esposas y
guíen a su familia en general porque ellos deben declarar esta verdad con sus
vidas (1 Tim 3:1-13; Tito 1: 3-9) ¿Es el evangelio el centro de tu matrimonio?
¿Declaras esta verdad cada día viviendo en amor, respeto y santidad en tu
matrimonio? ¿Trasmites esto a tus vecinos, hijos y amigos?
En segundo lugar debemos odiar el divorcio como Dios lo odia. Al tener una visión baja del matrimonio y del significado de
amor nuestra cultura se divorcia por cualquier cosa[11].
Sin embargo las Escrituras son clara que Dios odia el divorcio y que si él fue
permitido fue solamente por la dureza de los corazones de los hombres. Malaquías
2:16
“Porque
el Señor y Dios de Israel, el Señor de los ejércitos, claramente ha dicho que
aborrece el divorcio y a quienes encubren su iniquidad. Tengan, pues, cuidado
con su propio espíritu, y no sean desleales”
Es cierto que debido a que vivimos en un
mundo caído y que somos pecadores el divorcio puede convertirse en una
realidad, pero eso no significa que lo aceptemos como algo correcto o normal
sino que debemos llorar y lamentarnos cuando eso sucede. Cuando un matrimonio
entra en crisis lo primero que el mundo “aconseja” es que las personas se
divorcien pero para nosotros como cristianos esa es nuestra última opción. Si
miramos con cuidado estos consejos de Pablo veremos que él también tiene una
visión amplia del matrimonio pero tampoco niega esta realidad del pecado y nos
dice que puede pasar que alguno se separe. Pero inmediatamente dice que si eso
suele pasar que se quede sin casar o que se reconcilie con su marido. Esto
quiere decir que cuando un matrimonio vea que hay algún pecado en su matrimonio
lo que debemos hacer es siempre buscar la reconciliación por medio del perdón y
no el divorcio ni un nuevo matrimonio. La voluntad de Dios es que nuestros
matrimonios duran para toda la vida. ¿Es esa tu visión del matrimonio? ¿Odias
el divorcio como Dios lo hace? ¿Buscas la reconciliación cuando ves pecado en
tu matrimonio? ¿Son esos tus pensamientos o más bien son de divorciarte?
[1]
Nancy Pearcey. Verdad Total. Página 55-56
[2]
https://dle.rae.es/digresi%C3%B3n
[3]
Craig Keener. Comentario
cultural del Nuevo testamento. Página 465.
[4]
Gordon Fee. La primera epístola
a los Corintios. Páginas 258-260
[5]
William Hendriksen. 1
Corintios. Páginas 194-194. Craig
Blomerg. 1 de Corintios. Página 140.
[6]
Gordon Fee. La primera
epístola a los Corintios. Página 260.
[7]
https://www.pressreader.com/chile/la-hora/20190822/281505047873494
[8]
https://semperreformandaperu.org/2020/05/23/joven-reformado-y-vago-por-daniel-caballero/?fbclid=IwAR1tQ17wxogxpdWWnMVHSIzH5MbYq2K8wdM6Yt9JR9NQZE-EfwJlrNJTzTo
[9]
https://www.latercera.com/que-pasa/noticia/por-que-los-chilenos-ya-no-quieren-casarse-matrimonios-llegan-a-su-nivel-mas-bajo-de-la-ultima-decada/918264/
[10]
John Piper. Pacto matrimonial. Paginas 15-16.
[11]
https://www.emol.com/noticias/Nacional/2017/08/11/870529/Explosivo-aumento-en-Chile-de-divorcios-en-matrimonios-que-duran-5-anos-o-menos.html
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