Una de las cosas que se sabe de Latinoamérica
es que existen varios pastores bi-vocacionales. Esto significaría que la
persona tiene dos llamados[1]
o dos carreras o dos profesiones que desarrolla. Por un lado trabaja en su
profesión u oficio y por el otro trabaja de pastor. Para los pastores
bi-vocacionales las cosas tienden hacer bastante difíciles y por tanto es
importante que sean parte de un equipo o por lo menos eso es lo aconsejable
debido a la carga de trabajo. En dos artículos publicados en Coalición por el
evangelio se escribe sobre esta realidad
“Los
pastores bi-vocacionales y de iglesias pequeñas tienen las mismas
responsabilidades que tienen los demás pastores. De hecho, puedo decir que
tienen más responsabilidades, porque los pastores de iglesias más grandes
tienen equipos de trabajo y asistentes quienes pueden tomar una carga mayor de
sus responsabilidades. Por otro lado, los pastores bi-vocacionales y de
iglesias pequeñas por lo general no tienen a nadie más. ¿Quién más va a
preparar el sermón, visitar el hospital, aconsejar a los desconsolados,
realizar visitas evangelisticas, discipular a los hombres, incluso a veces
doblar boletines[2]?”
“¿Por qué
escoger este camino? ¿Por qué la complicación del doble trabajo y doble carga
de estrés? ¿Por qué el martirio de terminar una jornada laboral diaria para
comenzar el “turno de la noche” con los asuntos de la obra de Dios? La razón es
sencilla: Porque es nuestro llamado de parte de Dios, y no podemos violentarlo[3]”
Los pastores bi vocaciones tienen una carga
fuerte de trabajo por tanto la iglesia local a la cual sirve siempre debe ser
conciencia de esta realidad que el estará enfrentando. Ahora esta realidad
bi-vocacional no es algo nuevo ni en las Escrituras ni en la historia de la
iglesia pues podríamos nombrar a muchos hermanos y hermanas que se han dedicado
de esa manera a la obra de Dios. Y podríamos decir que uno de ellos fue el
apóstol Pablo. Sabemos que Pablo comienza este capítulo 9 conectándolo con el
capítulo 8 donde había escrito sobre el uso de la libertad cristiana. Luego
defiende ser un verdadero apóstol y muestra por medio de preguntas retoricas,
analogías cotidianas y las Escrituras que el cómo verdadero apóstol tiene el
derecho a ser sustentado por los hermanos de Corinto especialmente porque ellos
están dispuestos a sustentar a otros maestros.
1 Corintios 9:15
La elección de Pablo
Pablo termina de argumentar su defensa a su
apostolado como al derecho de ser sustentado por la congregación la cual fundo.
En la primera parte del versículo 15 podemos
ver que Pablo nos dice que “no me
aprovechado de nada de esto, ni tampoco he escrito esto para que se haga así
conmigo” (RVC) “Pero no me he aprovechado de ninguno de estos derechos, ni
escribo de esta manera porque quiera reclamarlos” (NVI) “Mas yo de nada de esto
me he aprovechado. Y no escribo esto para que así se haga conmigo” (LBLA)
Con su argumentación nos ha mostrado que lo
normal era que los ministros del evangelio fueran sustentados por sus
congregaciones como lo hicieron con los apóstoles, misioneros o maestros
itinerantes de la época. Sin embargo Pablo prefiere optar por otro camino que
es su reclamar el derecho apostólico a su sustento. Pablo opta por seguir
trabajando en su oficio junto con Aquila y Priscila cuando mientras fundan la
iglesia de Corinto y este es el argumento que en ocasiones muestra para mostrar
su diligencia en el evangelio. Hechos 18:1-3; 20:34
“Después
de esto, Pablo salió de Atenas y se fue a Corinto. Allí se encontró con un
judío que se llamaba Aquila, nacido en el Ponto, y que había llegado
recientemente de Italia junto con Priscila, su mujer, porque Claudio había
ordenado que todos los judíos salieran de Roma. Pablo fue a verlos y se quedó
con ellos para que trabajaran juntos, pues tanto ellos como el fabricaban
tiendas”
“Bien
saben ustedes que mis manos me han servido para ganar los que nos falta a mí y
a los que están conmigo”
Pero también en otras ocasiones Pablo recibe
ofrendas de hermanos que quieren apoyarle voluntariamente en su ministerio
mientras está sirviendo en Corinto. 2 Corintios 11: 8-9 Filipenses 4:15-16
“He
despojado a otras iglesias, al recibir un salario para serviles a ustedes. Y
cuando estaba entre ustedes y tuve necesidad, no fui carga para nadie, pues lo
que me faltaba lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia. Procure
entonces no ser una carga para ustedes, y seguiré haciéndolo así”
“Y bien
saben ustedes, hermanos filipenses, que al principio de la predicación del
evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia participo conmigo en
cuestiones de dar y recibir, sino solo ustedes. Incluso a Tesalónica una y otra
vez ustedes me enviaron para cubrir mis necesidades”
Por tanto Pablo era un apóstol que tenía
derecho a ser sustentado por las iglesias que ministraba sin embargo había
optado hacerlo voluntariamente pero si recibía ofrendas de hermanos en
ocasiones que le ayudaban a cubrir sus necesidades incluso sirviendo en la
iglesia de Corinto. En la segunda parte
del versículo 15 dice “Porque
prefiero morir antes que alguien me despoje de este motivo de orgullo” (RVC;
NVI) “Porque mejor me fuera morir, que permitir que alguno me prive de esta
gloria” (LBLA)
Cuando revisamos la carta de Corintios
encontramos que el “orgullo” o la “jactancia” es tratada varias veces de manera
pecaminosa (1 Cor 1:29; 5:6) Por tanto uno se puede preguntar ¿A qué se refiere
Pablo? ¿Acaso se está jactando o teniendo orgullo de forma pecaminosa? No, sino
que hay un “orgullo” o una “jactancia” valida es el orgullo o la jactancia en
poder de Dios. 1 Corintios 1:31
“Para que
se cumpla lo que está escrito: El que se gloria, que se gloríe en el Señor”
Entonces Pablo está usando una exageración
para decirnos que él prefiere morir antes que le quiten esa oportunidad de
poder jactarse o sentirse orgullo en el evangelio. Pablo puede ver que durante
su ministerio aunque él ha sido débil, insuficiente y en ocasiones no
considerado por otros se puede gloriar en el Señor. Este versículo nos puede
ayudar a pensar en varias cosas a las iglesias locales y a los pastores. En primer lugar va haber distintas
realidades de pastores o hermanos en una iglesia. Sabemos que las
Escrituras nos hablan que los oficiales de las iglesias son los pastores y los
diáconos. Y cuando pensamos en los ancianos o pastores estamos pensando en la
pluralidad de hombres piadosos en una iglesia. Sin embargo todos sabemos que en
el contexto latinoamericano es bastante difícil sostener a más de un anciano o
pastor cuando la iglesia es pequeña por tanto es bastante común encontrar a una
iglesia con varios pastores pero uno que es sostenido a tiempo completo y a que
los demás son bivocacionales que se sustentan con su propio oficio o profesión.
El ideal es que si Dios añade más personas a una iglesia esa iglesia piense en
sostener a más de un pastor a tiempo completo para cubrir todo el trabajo de la
obra. Pero también es cierto que va a haber pastores que voluntariamente van a
elegir ser pastores bivocacionales en la obra de Dios. Las razones pueden ser
diversas pero en ocasiones es porque son pastores que son más “misioneros” y
por tanto no dependen tanto de una iglesia sino que más de sus oficios o
profesiones y se mueven donde Dios les llame.
Otra distinta realidad en las iglesias
bautistas fueron los “hermanos dotados[4]”
estos hermanos son no son pastores o ancianos o diáconos sino hermanos que les
ha sido los dados los dones de enseñanza para la edificación de la iglesia.
Esto se encuentra en el capítulo 26 párrafo 11 de nuestra confesión.
“Aunque
sea la responsabilidad de los obispos o pastores de las iglesias, según su
oficio, estar constantemente dedicados a la predicación de la Palabra, la obra
de predicar la Palabra no esta tan particularmente limitada a ellos, sino que
otros también dotados o calificados por el Espíritu Santo para ello y aprobados
y llamados por la iglesia, pueden y deben desempeñarla”
Por tanto van a ver hermanos que tengan el
don de enseñanza pero que no necesariamente sean ancianos o pastores de una
iglesia. ¿Somos conscientes de todas realidades dentro de la iglesia local en
la cual participamos? ¿Oramos al Señor para saber cómo enfrentar todas
circunstancias? ¿Anhelamos que Dios levante obreros dentro de nuestra
congregación para que sean pastores a tiempo completos, medio tiempo,
misioneros o hermanos dotados? En segundo lugar la iglesia debe pensar en
su propia realidad y en la realidad de todos estos siervos. Como iglesia
debemos pensar y orar respecto a todas estas realidades pues sin duda habrán
algunos pastores que van a renunciar voluntariamente a sus “derechos” de ser
sustentados por la iglesia para no ser carga para ella como el apóstol Pablo lo
hizo. Pero también habrán algunos pastores que van a tener involuntariamente
renunciar a sus derechos de ser sustentados por la iglesia porque la iglesia no
tiene suficiente dinero para sustentarles y tal vez tengan que recibir apoyo de
otras iglesias o hermanos como el apóstol Pablo recibía. Sin embargo todas
estas preguntabas deben estar en nuestras mentes y oraciones pues ¿Qué haremos
cuando tengamos dos o tres pastores? ¿Qué haremos cuando alguno de los hermanos
diga tener un llamado misionero? ¿Qué haremos cuando se levanten hermanos
dotados dentro de la congregación? Todo esto debemos llevarlo a la oración ante
la presencia de Dios para que Dios nos ayude como iglesia a saber discernir con
sabiduría todo esto pues se trata de su obra en el mundo. Se trata que estos
hermanos van a estar predicando el evangelio a otras personas que no han
escuchado el evangelio. Se trata de personas salvadas de la condenación. Se
trata de la expansión del reino de Dios en el mundo.
En tercer lugar la iglesia y sus ministros deben gloriarse en el
evangelio. Pablo se gloriaba en el evangelio
porque reconocía su incapacidad y limitaciones y a pesar de eso podía ver la
gracia de Dios actuando en él. Como sabemos muchas personas idealizan la
comunión en las iglesias como también a los pastores o ancianos sin embargo al
tiempo en que vivamos juntos y nos vamos conociendo vamos a ir viendo las
debilidades de la iglesia como de sus pastores. Y lo que debería provocar en
nosotros eso es la oración más intensa y la dependencia total en el Señor a la
hora de tomar decisiones. Es por eso que cuando se ordenan pastores se requiere
“ayuno y oración” porque son decisiones importantes que muestran nuestra
dependencia en Dios. Esto revela nuestra incapacidad y limitaciones y que
solamente el evangelio puede guiarnos a hacerlo “correctamente”. Esto es lo que
hacemos las iglesias y los ministros del evangelio “gloriarse en el evangelio”
encontrar la sabiduría y la fuerza en él.
1 Corintios 9:16-18
El deber y recompensa de predicar el evangelio
Después que hablo deja claro que el no busca
que lo sustenten a el sino que simplemente está demostrando que está en su
derecho de que debieran sostenerlo. Sin embargo renuncia voluntariamente a ese
derecho y se “jacta” en el evangelio. Ahora Pablo comienza hablando de su deber
de predicar el evangelio. Nos dice en el
versículo 16 “Pues si anuncio el
evangelio, no tengo porque jactarme, por esa es mi misión insoslayable. ¡Ay de
mi sino predico el evangelio” (RVC) “Sin embargo, cuando predico el evangelio,
no tengo de que enorgullecerme, ya que estoy bajo la obligación de hacerlo. ¡Ay
de mi sino predico el evangelio! (NVI) “Porque si predico el evangelio, no
tengo nada de que gloriarme, pues estoy bajo el deber de hacerlo; pues ¡ay de
mi sino predico el evangelio!” (LBLA)
Pablo aquí está usando la palabra “jactancia”
o “enorgullecerse” de forma pecaminosa y dice que él ha predicado el evangelio
y no se ha jactado de ello. Pero ¿Acaso alguien podría predicar el evangelio
por jactancia o alguna otra razón pecaminosa? Pablo nos muestra que sí.
Filipenses 1:15-17
“A decir
verdad, algunos predican a Cristo por envidia y por pelear; pero otros lo hacen
de buena voluntad. Unos anuncian a Cristo por pelear, y no con sinceridad, pues
creen que así añaden aflicción a mis prisiones; pero otros lo hacen por amor, y
saben que estoy aquí para defender al evangelio”
Por tanto Pablo nos dice que él está
predicando el evangelio porque es una “misión
insoslayable” (RVC) “obligación” (NVI) “deber de hacerlo” (LBLA) Creo que
la palabra que encaja mejor aquí es la de que Pablo debe predicar el evangelio
porque es un deber hacerlo. Con este deber de hacerlo Pablo puede estar
refiriéndose a que tiene un fuerte sentido interno de hacerlo o se puede estar
refiriendo al destino divino que Dios había trazado para Pablo[5].
Pero en mejor entenderlo en el sentido que este es el destino que Dios había
determinado para Pablo y para eso había sido llamado por Dios desde antes de
nacer. Hechos 26:15-18; Gálatas 1:15-16.
“Yo le pregunté: ¿Quién eres, Señor? Y el
Señor me dijo: “Yo soy Jesús, a quien tu persigues. Ponte de pie, que me he
aparecido a ti porque tú vas a ser ministro y testigo de lo que has visto, y de
lo que aun te voy a mostrar. Yo te librare de tu pueblo y de los no judíos, y
quiero que vayas a ellos para que les abras los ojos y se conviertan de las
tinieblas a la luz, y del poder de Satanás al poder de Dios; para que por la fe
en mí, reciban el perdón de sus pecados y la herencia de los que han sido
santificados”
“Pero
Dios me aparto desde el vientre de mi madre y me llamo por su gracia, y cuando
a él le agrado revelar a su Hijo en mi para que yo anunciara entre los no
judíos, no me apresure a consultar a nadie…”
Jesús le había dicho a Pablo que el seria su
ministro y el llamado para predicarles a los gentiles y Pablo años después iba
a reflexionar sobre este llamado e iba a comprender que el al igual que
Jeremías (Jer 1:5) o Juan el Bautista (Lc 1:13-17) había sido escogido desde el
vientre de su madre para llevar a cabo el plan del Señor. Por tanto Pablo expresa
su temor sino cumpliera con esta misión que Dios le ha dado diciendo al final
del versículo 16 “¡Ay de mi sino predico el evangelio!
(RVC; NVI; LBLA) esta es una idea que la podemos ver en el Antiguo testamento. Isaías
5:8; Jeremías 23:1
¡Ay de
los que anexan una casa a otra casa, un terreno a otro terreno, hasta poseer
todo lugar! ¿Acaso quieren todo el país para ustedes solos?
¡Ay de
los pastores que destruyen y dispersan a las ovejas de mi rebaño!
También Jesús uso esta expresión para hablar
contra los juicios contra los líderes religiosos de la época (Mt 23:13, 15, 16,
23, 25, 27, 29) Por tanto lo que expresa Pablo aquí es que si el no cumple con
la comisión divina que se le ha encomendado tiene temor de enfrentarse al
juicio divino. Pablo sigue reflexionando sobre esto en el versículo 17 donde dice “Así
que si lo hago de buena voluntad, recibiré mi recompensa; pero si lo hago de
mala voluntad, no hago más que cumplir con la misión que me ha sido
encomendada” (RVC) “En efecto, si lo
hiciera por mi propia voluntad, tendría recompensa; pero si lo hago por
obligación, no haga más que cumplir la tarea que se me ha encomendado” (NVI)
“Porque si hago esto voluntariamente, tengo recompensa; pero si lo hago en
contra de mi voluntad, un encargo se me ha confiado” (LBLA)
Pablo usa la idea de mayordomía en este
versículo la cual ya había usado anteriormente (1 Cor 4:1) Por tanto lo que él
está diciendo acá es si como mayordomo hace esto con “buena voluntad” (RVC) o
“voluntariamente” (LBLA) entonces el recibirá su “paga” (recompensa) Pero si lo
hace con “mala voluntad” (RVC) o “contra de mi voluntad” (LBLA) simplemente no
hace más que cumplir con la misión o encargo que Dios le ha llamado a realizar
y no realizada “paga” (O recompensa) Con esto Pablo les estaba diciendo a los
hermanos en Corinto que el había sido encomendado por Jesús y aunque ellos no
les sustentaran él iba a recibir su “paga” o “recompensa” del Señor. La idea de
las recompensas está en varias partes de las Escrituras como por ejemplo Mateo
10:41-42; 1 Corintios 3:14
“El que
recibe a un profeta porque es profeta, recibirá igual recompensa que el
profeta: y el que recibe a un justo porque es justo, recibirá igual recompensa
que el justo. De cierto les digo que cualquiera que dé a uno de estos
pequeñitos aunque sea un vaso de agua fría, por tratarse de un discípulo, no
perderá su recompensa”
“Si lo
que alguno sobreedifico permanece, ese recibirá su recompensa”
Por tanto Pablo está diciendo algo así como
si predico de buena voluntad el evangelio recibiré recompensa (o paga) pero si
hago de mala voluntad de igual manera cumplo con mi deber de predicar el
evangelio. Jesús pone un ejemplo sobre este deber que tenemos como siervos en
Lucas 17:7-10
“Si
alguno de ustedes tiene un siervo que ara o apacienta el ganado, ¿acaso cuando
el vuelve del campo le dice: “Pasa y siéntate a la mesa”? ¡No! Más bien, le
dice: “Prepárame la cena, y arréglate la ropa para servirme mientras yo como y
bebo. Después podrás comer y beber tu”. ¿Y acaso se le agradece al siervo el
hacer lo que se le ordena? Así también ustedes, cuando hayan hecho todo lo se
les ha ordenado, digan: “Somos siervos inútiles, no hemos hecho más que cumplir
con nuestro deber”
Esto nos enseña que si yo cumplo con mi deber
simplemente soy un “siervo inútil” que hecho lo que se me ha mandado. Pablo
concluye con esta idea en el versículo
18 diciendo ¿Cuál es, pues, mi
recompensa? La de predicar el evangelio de Cristo de manera gratuita, para no
abusar de mi derecho del evangelio” (RVC) “¿Cuál es, entonces, mi recompensa?
Pues que al predicar el evangelio pueda presentarlo gratuitamente, sin hacer
valer mi derecho” (NVI) ¿Cuál es, entonces, mi recompensa? Que al predicar el
evangelio pueda ofrecerlo gratuitamente sin hacer pleno uso de mi derecho en el
evangelio” (LBLA)
Pablo quiere entonces decirnos ¿Cuál es
verdaderamente mi recompensa en el ministerio que realizo? La recompensa es
predicar el evangelio sin recibir ninguna paga de ustedes o sea gratuitamente
para así no parecer que estoy abusando de mi derecho en el evangelio. Por tanto
estos versículos nos enseñan algunas cosas importantes
Primero que todos tenemos la misión de predicar el evangelio. Pablo comprendía que había sido escogido desde antes de la
fundación del mundo y que su misión como apóstol era predicar el evangelio en
todo lugar y levantar iglesias en las diversas ciudades como lo había hecho con
Corinto. Sin duda el oficio de apóstol ya ha cesado y ya no tenemos apóstoles
que sean el fundamento de la iglesia sino que construimos a partir de la
doctrina apostólica que está en la Escritura. Sin embargo todos tenemos la misma misión que
el apóstol Pablo que es predicar el evangelio a toda persona. Los pastores
tiene el deber de predicar, los pastores bivocacionales tienen el deber de
predicar y todo cristiano tiene el deber de predicar. Pero ¿Es realmente como
nos vemos a nosotros mismos? ¿Realmente vemos la urgencia del evangelio en
nuestro mundo? ¿Realmente ponemos como prioridad el predicar el evangelio? Todos
estamos en distintas etapas de la vida, algunos están como estudiantes, otros
como trabajadores, solteros, novios, esposos, padres, etc? Pero alrededor de
todas las decisiones que tomamos o contextos en los cuales estamos ¿Es el
evangelio prioritario? ¿Veo que mis compañeros de estudio o trabajo como gente
que necesita el evangelio? ¿Veo a mi novio, esposo o padre como necesitado del
evangelio? ¿Veo a mis hijos como necesitamos del evangelio? Nuestro propósito
en la vida debe ser glorificar a Dios predicando el evangelio en todas las
formas y contextos posibles que Dios nos ponga. ¿Es este tu propósito, tu
misión insoslayable, por lo que vives cada día?
En segundo lugar que el evangelio nos llama a renunciar a
nuestros derechos y pagar el precio por el evangelio. Pablo tenia legítimos derechos apostólicos para ser sustentados
sin embargo renuncio a ellos por amor al evangelio. En una cultura como la
nuestra que enfatiza sus derechos nosotros podemos fácilmente seguir la misma
lógica y decir que tenemos ciertos derechos y por supuesto que los tenemos pero
por amor al evangelio podemos renunciar a esos derechos. Me imagino que todos
conocemos el artículo 1 de la declaración universal de los derechos humanos en
donde se escribió[6]:
“Todos
los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como
están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos a los
otros”
Es impresionante como en esta declaración se
asumen cosas de forma indiscutida, incuestionablemente porque ¿Quién determina
que las personas son libres? ¿Quién determina la igual en dignidad? ¿Quién
determina los derechos? ¿Quién dice que debemos comportarnos fraternalmente?
Bueno Dios es el fundamento de todas estas cosas y aunque tenemos estos
derechos son regalos dados por Dios a la humanidad reconocemos que también
podemos renunciar a ellos por amor al evangelio. Pablo estuvo dispuesto a
renunciar a sus derechos porque seguía los pasos de su Maestro Jesucristo el
cual siendo Dios renuncio a su posición divina y vino al mundo a morir por los
pecados. ¿Estamos nosotros igualmente dispuestos a renunciar a nuestros
derechos por amor al evangelio? ¿Por amor a los hermanos? ¿Por amor a la
humanidad?
[1]
Vocación significa “Inspiración con que Dios llama a algún estado,
especialmente al de religión. Inclinación a un estado, una profesión o una
carrera. Convocación, llamamiento. https://dle.rae.es/vocaci%C3%B3n
[2]
https://www.coalicionporelevangelio.org/articulo/mis-heroes-pastores-bi-vocacionales-pequenas-iglesias/
[3]
https://www.coalicionporelevangelio.org/articulo/cosiendo-tiendas-pablo-ministerio-bi-vocacional/
[4]
James Renihan. Edificacion y
Belleza. La Eclesiología practica de los Bautistas Particulares Ingleses
1675-1705. Páginas 91-96
[5]
Gordon Fee. La primera epístola a los Corintios. Página 363-364
[6]
https://www.ohchr.org/EN/UDHR/Documents/UDHR_Translations/spn.pdf
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