Desde
el principio de la humanidad Dios ha establecido autoridades en la familia (Gen
1:27-29) en la iglesia (1 Tim 3:1-13) y en los países (Rom 13:1-5) Por tanto
¿Debe un novio (a) estar bajo alguna autoridad? Claro que sí. Me ha sorprendido
escuchar a hermanos decir que el noviazgo puede vivirse solo con la pareja sin
ninguna supervisión. ¿No son acaso los jóvenes poco sabios para tomar decisiones?
Veamos un ejemplo de las Escrituras:
“Roboam fue a Siquem, porque todo Israel había venido a Siquem
para hacerle rey. Y aconteció que cuando lo oyó Jeroboam hijo de Nabat, que aún
estaba en Egipto, adonde había huido de delante del rey Salomón, y habitaba en
Egipto, enviaron a llamarle. Vino, pues, Jeroboam, y toda la congregación de
Israel, y hablaron a Roboam, diciendo: Tu padre agravó nuestro yugo, mas ahora
disminuye tú algo de la dura servidumbre de tu padre, y del yugo pesado que
puso sobre nosotros, y te serviremos. Y él les dijo: Idos, y de aquí a tres
días volved a mí. Y el pueblo se fue. Entonces el rey Roboam pidió consejo de
los ancianos que habían estado delante de Salomón su padre cuando vivía, y
dijo: ¿Cómo aconsejáis vosotros que responda a este pueblo? Y ellos le hablaron
diciendo: Si tú fueres hoy siervo de este pueblo y lo sirvieres, y
respondiéndoles buenas palabras les hablares, ellos te servirán para siempre.
Pero él dejó el consejo que los ancianos le habían dado, y pidió consejo de los
jóvenes que se habían criado con él, y estaban delante de él. Y les dijo: ¿Cómo
aconsejáis vosotros que respondamos a este pueblo, que me ha hablado diciendo:
Disminuye algo del yugo que tu padre puso sobre nosotros? Entonces los jóvenes
que se habían criado con él le respondieron diciendo: Así hablarás a este
pueblo que te ha dicho estas palabras: Tu padre agravó nuestro yugo, mas tú
disminúyenos algo; así les hablarás: El menor dedo de los míos es más grueso
que los lomos de mi padre. Ahora, pues, mi padre os cargó de pesado yugo, mas
yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os castigaré
con escorpiones. Al tercer día vino Jeroboam con todo el pueblo a Roboam, según
el rey lo había mandado, diciendo: Volved a mí al tercer día. Y el rey
respondió al pueblo duramente, dejando el consejo que los ancianos le habían
dado; y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó
vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes,
mas yo os castigaré con escorpiones. Y no oyó el rey al pueblo; porque era designio de Jehová para
confirmar la palabra que Jehová había hablado por medio de Ahías silonita a
Jeroboam hijo de Nabat” 1 Reyes 12:1-15
Con esto
no estoy diciendo que todos los jóvenes tomaran decisiones poco sabias como
estas, pero no tengo problema en creer que la mayoría de los jóvenes si tomaran
decisiones poco sabias. En su famoso libro “Pensamientos para hombres jóvenes”
de J.C Ryle,[1] el advierte sobre esta actitud en los jóvenes:
“¡Cuán común es ver a los jóvenes
impetuosos, arrogantes e intolerantes ante el consejo! ¡Con cuánta frecuencia
son ofensivos y descorteses con todo lo referente a ellos, considerando que no
son valorados ni honrados como ellos se merecen! ¡Cuán a menudo no se detienen
a escuchar una sugerencia de una persona de más edad! Ellos creen que lo saben
todo. Están llenos de engaño en cuanto a su propia sabiduría. Estiman como estúpidas,
tontas y lentas a las personas de avanzada edad, y en especial a sus parientes.
Presumen que no necesitan enseñanza ni instrucción: ellos entienden todas las cosas.
Si se les habla, se ponen casi coléricos. Al igual que un potro, no pueden
tolerar el menor indicio de control”
Los
novios en general son personas jóvenes que viven en las casas de los padres y
por tanto su debes es honrarlos como Dios ha mandado (Exo 20:12; Efe 6:4) y eso
incluye escuchar los consejos que ellos pueden proveerte. Un padre piadoso es
alguien que sabe que debe guiarte a los caminos del Señor ensenando todos los
mandatos de las Escrituras (Dt 6:6-9) Un padre piadoso es alguien que enseñará a su hijo el
temor del Señor (Prov 1:7) y por tanto le llamará a escuchar sus consejos de
alejarse de los pecadores (Prov 1:8-19)
y le proveerá sabiduría para obedecer la ley de Dios (Prov 3:1-12) y lo alejará
de la mujer extraña (Prov 5) y de la pereza (Prov 6:6-11) etc.
Pero
¿qué pasa en el caso que no tenga Padres creyentes? Entonces el debe buscar
ayuda en los ancianos y diáconos piadosos de la iglesia (1 Tim 3:1-11) pues
deben estar sujetos a ellos (Hebreos 13:17; 1 Pedro 5:5) y buscar consejo en
ellos como padres piadosos. Debemos decir que lamentablemente no existen muchos
padres piadosos ni ancianos piadosos que puedan aconsejar bíblicamente a los
jóvenes. Por tanto ¿Qué pasa en el caso que no existan padres piadosos ni ancianos
piadosos? Entonces debe orar a Dios para que él le provea algún hermano sabio
que lo pueda ayudar en la consejería respecto a este tema (Prov 11:4)
La unión de dos pecadores
diferentes
Ambos somos pecadores: Una
de las cosas que nos muestran las Escrituras es que aunque somos nueva criatura
en Cristo (2 Cor 5:17) aun el pecado esta en nosotros (1 Juan 1:8-10) por tanto
cuando pensemos en casarnos debemos considerar que nos vamos a unir a otro
pecador. Esto es algo que no consideramos en serio hasta cuando nos casamos. No
estoy diciendo que esto que el matrimonio es terrible o que todo es hermoso,
sino que simplemente la realidad de los creyentes que somos pecadores redimidos
por Cristo. Por tanto en ocasiones te veras involucrado en discusiones y enojos
debido a nuestro pecado y allí donde debemos aplicar el evangelio en todo
momento. Los hombres se preguntaran ¿Por qué ella no se sujeta a mí, porque no
me respeta? Y las mujeres se preguntaran
¿Por qué no me ama? ¿Por qué es tan insensible? La respuesta es porque somos
pecadores. Por eso importante aprender lo que las Escrituras nos tienen que
decir acerca del perdón y la reconciliación. Jesús nos perdono, por tanto nos
llama a perdonar (Mt 6:12; 14-15) ¿Cuántas veces debes perdonar a tu futura
esposa y esposo? (Mt 18: 21-35) debemos ser como Cristo perdonadores (Efe 4:32;
Col 3:13) estamos llamados a ser reconciliadores (2 Cor 5:18-20)
Hombres y mujeres son diferentes[2]:
Esto
es algo que puede sonar obvio, pero no siempre es así entre los hombres y las
mujeres. Quizás menos hoy en día donde las diferencias entre hombres y mujeres
quieren borrarse. El libro llamado “Sexo en el cerebro, la verdadera diferencia
entre hombres y mujeres”[3] explica lo diferente que
somos hombres:
Los hombres son diferentes de las mujeres. Son iguales tan sólo en su
común pertenencia a la misma especie: el género humano. Sostener que son
iguales en aptitudes, habilidades o comportamiento es construir una sociedad
basada en una mentira biológica y científica. Los sexos son diferentes porque
sus cerebros son diferentes. El cerebro, El jefe en la administración de las
emociones y el órgano de la vida, tiene una construcción diferenciada en el hombre
y la mujer; éste procesa información en forma diferente, lo que resulta en
diferentes percepciones, prioridades y comportamientos. En los últimos diez años ha habido una explosión de investigación
científica sobre qué hace diferente a los sexos. Doctores, científicos,
psicólogos y sociólogos, en trabajos por separado, han producido un cuerpo de
descubrimientos que, al unirse en sus partes, esboza una imagen de notables
diferencias[4].
Otro libro escrito llamado “Usted simplemente no entiende: mujeres y
hombres en conversación” escrito por la doctora Deborah Tannen trata sobre
la diferencia entre hombres y mujeres y dice:
“Pretender que mujeres y hombres sean iguales daña a las mujeres, porque
la manera como estas son tratadas se basa en las normas para los hombres.
También hace daño a los hombres, quienes, con buenas intenciones, hablan a las
mujeres como lo harían a los hombres, y son desventajosos, cuando sus palabras
no funcionan como esperaban, e incluso genera resentimiento e ira. Si reconocemos
y entendemos las diferencias entre nosotros, podemos tomarla en cuenta,
adaptarlos y aprender de los estilos unos a otros”.
El año 2015 un noruego llamado
Harald Eia hizo un reportaje en noruega llamado “La paradoja de la igualdad[5]”en
donde muestra que a pesar de que Noruega es uno de los países más iguales del
mundo en el campo del desarrollo el 90% de las mujeres se dedica a la
enfermería y 80% de los hombres se dedica a la Ingeniería. Esto se explicaría
por la diferencia de intereses que tienen los hombres y las mujeres.
Todos estos datos parecieran
no tener mucha relevancia pero a la hora de la convivencia esto cobrará mucha
importancia. ¿Alguna vez se han puesto a pensar porque Dios le dio el rol de
proveedor al hombre y el rol de la maternidad a la mujer? Esto es porque Dios
nos creo distintos, el hombre está hecho para conquistar y cumplir objetivos. Así
es como cotidianamente actuamos cuando bromean diciéndonos que “no podemos
hacer dos cosas a la vez”. Las mujeres en cambio son más sensibles y piensan
integralmente, o sea pueden hacer muchas cosas a la vez. Cuando miran algo,
pueden mirarlo por todos lados (como las cortinas, los colores, la ropa) es
simplemente porque ellas están diseñadas así. El aprender a conocer estas
diferencias antes de casarse ayuda mucho. Por eso el Señor nos llama a
tratarlas como vaso frágil y vivir sabiamente con ellas (1 Pedro 3:7)
Ambos tienes distintos contextos
sociales: Cuando uno se casa es como si dos culturas distintas de
unieran. Uno fue criado de una manera y el otro de otra manera. Por ejemplo yo
crecí en barrios donde la droga, el alcohol y la prostitución eran normales. Mi
madre era madre soltera y ella nos crió. Crecí en un hogar “disfuncional”,
estuve internado en un hogar de menores y luego en un centro de rehabilitación
de conducta. Conozco bastante acerca de la calle y nunca fui muy civilizado
para vivir. En cambio mi esposa creció
en un hogar cristiano donde sus padres la educación en la fe cristiana. Siempre
participo en las reuniones de la iglesia. Esto no significa que no tuvo
problemas, pero digamos que no tuvo los mismos problemas que yo. Por tanto
cuando uno se casa debe conocer los trasfondos de lo que uno procede porque eso
puede influenciar a la hora de convivir. Estoy convencido que solamente el
Espíritu Santo es quien logra transformarnos.
[1] http://www.chapellibrary.org/files/archive/pdf-spanish/tfyms.pdf
[2] La
información es tomada del libro Distintos por diseño. John MacArthur. Páginas
7-13. Otros libros no cristianos que pueden ayudar a tomar conciencia de esta
diferencia son John Gray. Los hombres son de Martes y las mujeres de Venus.
Pilar Sordo. Viva la diferencia.
[3] https://www.casadellibro.com/libro-el-sexo-en-el-cerebro-la-verdadera-diferencia-entre-hombres-y-mujeres/mkt0002593498/3795629
[4]
Sexo en el cerebro. Página 6.
[5] https://www.youtube.com/watch?v=tYeezuChG7Q&index=2&list=PLsJr1v-LDZBX4KXOuz769DJ-aPO_AP3_y
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